La ley CISPA de ciberseguridad: un salto 'sin red' hacia un estado policial
El controvertido proyecto de ciberseguridad CISPA, que permitiría a la Administración norteamericana tener mayor acceso a los datos privados de los internautas, está a dos pasos de convertirse en ley. Tras ser aprobado por la Cámara de Representantes de EE. UU., ahora queda esperar que se pronuncie el Senado, que lo votará en breve, y el presidente Barack Obama, que ya amenazó vetar el proyecto.
Ante esta situación, los expertos advierten que con la CISPA, al igual que con otras iniciativas parecidas, EE. UU. se desliza peligrosamente hacia un "estado policial".
"Cada movimiento, cada llamada de teléfono, cada comunicación electrónica, cada conversación por Skype y cualquier actividad de los ciudadanos será debidamente registrada y los ciudadanos tendrán que aceptar que se les espía en todo lo que hacen", expresó a RT el fundador de la organización 'Vamos Unidos USA', Juán José Gutiérrez.
El experto sostiene que se trata de una violación de la privacidad, derecho que garantiza la Constitución del país. "Esto está prohibido por la ley Suprema del país y, sin embargo, bajo la excusa de ciberseguridad se trata de convencer a la ciudadanía de que acepte que se le viole su derecho a la privasidad", expresó.
Asimismo, Gutiérrez asegura que lo que está pasando es que cuando EE. UU. toma decisiones "impopulares", como invadir un país o declarar la guerra, siempre dice que lo está haciendo para proteger a la nación, pero en realidad sirve a intereses de algunos sectores de la sociedad norteamericana.
La CISPA está considerada como una ley mucho más restrictiva que su polémica y archivada antecesora, la ley SOPA, ya que no detiene el intercambio de archivos "piratas" entre usuarios, sino que almacena su información personal, para luego adoptar las medidas necesarias.