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Moscú condena el ataque ucraniano con dron kamikaze contra personal del OIEA
Un vehículo que transportaba a los expertos de la organización fue atacado en territorio controlado por Kiev.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia condenó este miércoles "enérgicamente" el ataque que el régimen de Kiev perpetró la jornada anterior contra los expertos de la Secretaría del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) durante su rotación en la central nuclear de Zaporozhie.
Desde el ministerio detallaron que el ataque ocurrió en territorio controlado por Kiev y se llevó a cabo contra un vehículo del OIEA que transportaba a personal de la agencia. Posteriormente, las fuerzas ucranianas lanzaron otro ataque contra el convoy ruso que había acompañado al personal del organismo internacional hasta la línea de contacto de combate.
"Ataque absolutamente inaceptable"
Desde el OIEA, por su parte, especificaron que uno de sus vehículos oficiales fue impactado y severamente dañado por un dron. "El personal del OIEA, un conductor y un oficial de seguridad, que estaban en el vehículo blindado en el momento del incidente, a las 14.05 hora local, resultaron ilesos, pero la parte trasera del vehículo quedó destruida", reza el comunicado del organismo.
El conductor de un segundo automóvil del OIEA había visto al dron kamikaze acercarse por detrás y estrellarse contra el vehículo atacado, señala la agencia. "El incidente se produjo a unos 8 kilómetros de la línea del frente, en el territorio controlado por Ucrania", agrega.
El director del OIEA, Rafael Grossi, condenó "con la mayor firmeza" este ataque. "He dicho en el pasado que atacar una planta de energía nuclear es inaceptable. Atacar a quienes se preocupan por la seguridad nuclear de esas plantas también es absolutamente inaceptable", criticó, sin precisar la autoría del ataque.
Reacción de Moscú
En este sentido, la Cancillería rusa ha declarado que comparte "la indignación de los dirigentes del OIEA por estas acciones provocadoras e imprudentes del régimen de Kiev, que no solo continúa cometiendo crímenes, creando amenazas y atacando las instalaciones nucleares rusas, sino que también puso en peligro de muerte a los empleados de una organización internacional, así como a personal militar ruso que garantizaba la realización de la rotación".
Además, este ataque "demuestra el total desprecio por parte de las autoridades ucranianas hacia las normas generalmente aceptadas del derecho humanitario y de cualquier acuerdo alcanzado, así como una flagrante falta de respeto a la inmunidad del personal de las organizaciones internacionales".
"Condenamos enérgicamente estas acciones del régimen de Kiev, que empezó a creer con firmeza en su impunidad".
Se ha constatado "con indignación" que el líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, y los que le apoyan, "están cometiendo crímenes cada vez más atroces" y "no tienen en cuenta ni las consecuencias ni la opinión internacional, rechazando esencialmente el concepto mismo y los principios de seguridad nuclear", denunció el ministerio. Zelenski y Occidente anteponen "sus ambiciones y políticas dañinas y destructivas", añadió.
Asimismo, la Cancillería rusa hizo hincapié en que el ataque del régimen de Kiev representa "una provocación evidente" antes de la celebración de la sesión extraordinaria de la Junta de Gobernadores del organismo, convocada por iniciativa ucraniana para el 12 de diciembre. "Hacemos un llamado a EE.UU., el Reino Unido y sus aliados para que dejen de apoyar al régimen de Zelenski y tomen medidas para llevar ante la justicia a los responsables de organizar y ejecutar esta provocación", instó.
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