Hallan una fosa común con restos de civiles polacos asesinados en 1943 por nacionalistas ucranianos
En la ciudad de Púzniki, en la región de Ternópol, Ucrania, investigadores polacos y ucranianos encontraron un pozo con restos de víctimas de la masacre de Volinia de 1943, informó el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, en su cuenta de X (anteriormente Twitter).
Según datos del Instituto de Memoria Nacional de Polonia, durante la Segunda Guerra Mundial, entre los años 1943 y 1945, los nacionalistas ucranianos atacaron decenas de poblaciones polacas, causando entre 80.000 y 120.000 muertes.
"La verdad sobre la masacre de Volinia debe ser nuestro puente hacia el futuro, que construiremos sobre la corriente del odio", enfatizó Morawiecki, que se comprometió a terminar los trabajos en el nombre de los civiles asesinados.
"Debemos cerrar esta dolorosa herida en la historia de las naciones polaca y ucraniana", invocó el jefe del Gobierno polaco. En este sentido, señaló que no puede haber una reconciliación completa entre Polonia y Ucrania sin encontrar todos los restos de las víctimas de la masacre de Volinia, informan medios locales.
El jefe de la Cancillería de Polonia, Michal Dworczyk, explicó que "este es el primer caso en más de nueve años en que se encuentran en Ucrania restos de polacos, víctimas de los nacionalistas ucranianos".
W byłej miejscowości Puźniki (rejon Czortków, obwód Tarnopolski na Ukrainie) specjaliści polscy i ukraińscy, po czterech miesiącach trudnych poszukiwań szczątków Polaków, ofiar ukraińskich nacjonalistów, odnaleźli zbiorowy dół, w którym w 1945 r. złożono ciała pomordowanych… pic.twitter.com/xDtKYzlaVA
— Michał Dworczyk (@michaldworczyk) October 27, 2023
Por su parte, Maciej Dancewicz, organizador de la búsqueda de los cuerpos, informó que las personas con heridas de bala en los cráneos fueron enterradas sin ataúdes y de manera irregular. "Probablemente eran en su mayoría mujeres", expuso.
Las autoridades polacas están a la espera del consentimiento de las instituciones ucranianas para la exhumación, la investigación y el entierro digno de los cuerpos.
En mayo, Varsovia instó a Kiev a pedir disculpas por la masacre de Volinia de 1943, reconocida por Polonia como genocidio.